15 de junio de 2007

a rastras

Estos días la vida me lleva a rastras, corre demasiado. Cuando me pregunto cuál será el motivo de este desequilibrio entre mi vida y yo, la única respuesta que se me ocurre es que estoy cerrando un ciclo que no estoy segura de querer dejar atrás.

Aunque sé que el paso del tiempo es inevitable, algo contra lo que no podemos luchar, reivindico mi derecho a quejarme. Al fin y al cabo, es el único consuelo que me queda.


1 comentario:

la_filologa dijo...

No te deprimas ahora, mujer, guarda eso del cierre de ciclo para cuando acabes el erasmus, ya verás, ya...

En otro orden de cosas, y yendo a temas especialmente relevantes en el milán... ¿hubo finalmente un sorteo entre las chicas de la zona en el que el premio fue una noche de lujuria con el becario de la sala de ordenadores? Porque si lo hubo, a mí no me avisó nadie para comprar papeleta y yo por ahí no paso. Que no...